Por: Fernando Cuadros y Vanessa Sandoval
La Comisión Multisectorial del Poder Ejecutivo negó hace unos días aplicar las salvaguardias definitivas a las confecciones asiáticas alegando que no hubo una lectura fiel de la industria textil nacional por motivos técnicos, a pesar de que los datos reflejan el dominio de la ropa importada en el mercado.
“La industria textil y confecciones es una sola (…) Nos sorprendió que la comisión haya definido dejar sin efecto la investigación solo por no alcanzar un determinado número de encuestas”, sostuvo Jesús Salazar, presidente de la SNI.
Salazar recordó que —en datos de Indecopi— el 95% de las prendas compradas en el Perú es importada, y estas les cuesta en promedio US$4 a las productoras chinas, pero ingresan, en promedio, a US$2,6 por unidad, en un contexto en el que el precio de las materias primas que pagan las mypes peruanas subió hasta 67% —solamente en la elaboración de polos y pantalones, respectivamente— desde el 2019. En ropa interior, la variación es de 1,6%.
Mano de obra en riesgo
Susana Saldaña, presidenta de la Asociación Gamarra Perú, alertó que un millón de empleos podrían desaparecer de no aplicarse las salvaguardias; de este universo, 600.000 son mujeres.
Además, de las 100.000 empresas de la cadena textil-confecciones, el 99% es mype.
“Exigimos que se abra una nueva investigación por salvaguardias y se actualicen las cifras para demostrar técnicamente no solo cómo las importaciones han invadido el país, sino dejar a un lado el interés de satisfacer a los grandes importadores”, dijo a La República.
Saldaña reiteró que este pedido no se debe entender como un regalo a las mypes, sino que solo apunta a competir en equilibrio y no con precios predatorios de las fábricas chinas y bangladesíes, las cuales tampoco cumplen estándares de calidad.
Hartos de esperar
Desde la Asociación Peruana de Industriales Confeccionistas (Apic-Gamarra) cuestionaron al Produce por no implementar aún la mejora en las tasas de crédito para las mypes, las cuales deben ser, como máximo, del 10% y no del 17%.
“No queremos el bono del buen pagador porque vivimos momentos críticos y el Gobierno no da estabilidad política ni económica”, agregó.
Fuente: https://acortar.link/6ugF77